CHIAPAS.- Uriel Berzain Morales, agente de Investigación Criminal de la Fiscalía General de la República (FGR) en la Sudelegación Villaflores, Chiapas, fue asesinado la tarde del lunes 25 de septiembre, mientras conducía su auto, un Mustang color rojo por el kilómetro 70 de la vía que conecta al Municipio de Arriaga con Coita, muy cerca de Cintalapa.
Esto, ocurrió a solo unas horas del reciente desfile de la caravana de civiles armados miembros del Cártel de Sinaloa por municipios de Chiapas.
De acuerdo con datos extraoficiales, a Berzaín se le conocía como “El Yankee”, El JR, o el Junior.
El vehículo Mustang Rojo quedó con impactos de arma de fuego AK-47.
El agente tenía dos meses de estar adscrito al Municipio de Villaflores y anteriormente había estado en la delegación de la FGR en San Cristóbal de las Casas.
Más tarde, por la noche, la delegación de la FGR de Villaflores fue atacada.
De acuerdo con medios de comunicación locales, una fuente de seguridad reportó detonaciones de armas de fuego en distintos puntos de Villaflores, por lo que pobladores han decidido resguardarse en sus viviendas.
Sin embargo, la Fiscalía General del Estado no ha reportado sobre el agente asesinado ni las balaceras en las calles.
“Estos movimientos están conectados con lo que sucede con la narcoviolencia de la Sierra de Chiapas. Hay zonas donde a los grupos delictivos les falta tomar el control y Villaflores es uno de ellos”, dijo la fuente de seguridad.
Villaflores está ubicado en el centro de Chiapas, a casi dos horas de la Tuxtla Gutiérrez. El Municipio es gobernado por Mariano Rosales, quien durante los festejos patrios perdió a su hijo, que fue asesinado por un líder transportista, señalan.
